me meso en el andar
pareciendo ya un
vaivén más.
Recorro las calles
gritando tu nombre
y en las solas noches
con tus recuerdos me ahogo.
¡Mira!... mira las viejas fotos,
las viejas cartas, aquellos peluches
y el montón de papeles
que guardabas bajo tu cama.
Ahora estoy recordando tu sonrisa,
recuerdo tus caricias, las promesas
de una vida inolvidable
y un castillo junto al mar.
Ahora sólo me queda tu recuerdo,
los lugares a los que fuimos,
el perfume que me hipnotizaba
y el cálido sonido de tu voz, mi cielo.
Y no importa cuantas veces más
recorra los lugares, vea los recuerdos
e intente interpretar lo ocurrido,
pues por más que busco hoy no te encuentro.
Prometiste no ser más que
un recuerdo, estar siempre
a mi lado, codo a codo, sin embargo,
hoy sólo eres un sueño.
Lo que más recuerdo es la última vez
junto a ti, sin consuelo y sin rumbo
sólo me desplomé y de mis ojos llovía
un mar de ilusiones que se morían.
